CUIDADOS ESTETICOS EN TRATAMIENTOS ONCOLOGICOS

           Todos conocemos los posibles cambios en el aspecto físico que, aunque en general no son graves clínicamente, sí son importantes para uno mismo. Cuando nos vemos bien y a gusto con nuestro aspecto, nos sentimos más fuertes para vivir nuestro día a día; un sentimiento que no cambia durante la enfermedad.

La piel es el órgano más extenso que tenemos y que nos protege del exterior. Los cambios que pueda sufrir
serán en la mayoría de los casos transitorios: sequedad, manchas o irritaciones. Desde Lola Garre queremos proporcionar algunas pautas básicas y soluciones sencillas para minimizar estos posibles efectos que, si se conocen, se pueden prevenir o mitigar; así como dar información de los productos y tratamientos estéticos que mejor ayudarán en el cuidado de la piel.

Todos los efectos o alteraciones que te detallamos a continuación son orientativos y cambian según cada persona. Es importante que siempre se consulte con el médico culaquier efecto y se sigan sus pautas y recomendacines. 




Limpia e hidrata tu piel cada día: 
Un denominador común para todas las pieles sensibilizadas es la de mantener una buena higiene facial y corporal.
Limpiar y desmaquillar la piel cada día, mañana o noche, con cosméticos delicados.
Limpiadores y tónicos, libres de alcohol, a base de ingredientes como el Té Verde y la Pikea Robusta(grandes antioxidantes) son perfectos para pieles sensibilizadas o particularmente delicadas.

Para la limpieza corporal:
Se recomiendan duchas o baños no muy prolongados con agua templada y jabones de ph neutro, aclarándolos muy bien y evitando posibles irritaciones. Es aconsejable hidratar la piel de rostro y cuerpo a diario(mañana y nohce) con sérum, cremas y lociones ricas en mantecas de Karité y Mango. El aceite de rosa mosqueta y Avellana, así con el Aloe Vera, el aceite de Aguacate, la manteca de Mango y las Vitaminas D+F, entre otros, poseen un alto poder para restaurar el nivel de hidratación cutánea, Además de calmarla, regenerarla y protegerla.

Una Buena protección del Sol:
Siempre es recomendable una buena protección solar, especialmente durante la época estival. Hemos de saber que algunos de los fármacos que contiene la quimioterapia pueden ser fotosensibles, es decir, pueden provocar alguna reacción cutánea al entrar en contacto con el sol.
Por ello, es necesario protegerse seriamente del sol. Los filtros solares (de alta tolerancia) ayudarán a proteger y reparar la piel de todo el cuerpo siendo aconsejable escoger un factor de protección elevado que le darán una gran sensación de comodidad a la piel  a la vez que la mantendrán hidratada evitando descamaciones o irritaciones. 

¿la cicatriz también debe hidratarse?
Es muy probable que en la zona donde está la cicatriz se sienta tirantez  y molestias. Para aliviar esa sensación, es importante aplicarse productos que mejoren la elasticidad de la piel como la ROSA MOSQUETA (altamente regenerador y nutritivo)

La importancia de ir a la esteticista:
Una esteticista especializada puede aconsejar sobre los productos y tratamientos más indicados en cada  momento para cuidar la piel. Su labor es la clave en un momento en el que al paciente le invaden numerosas dudas cuando empiezan  a producirse los primeros cambios físicos derivados de los tratamientos médicos. Además , ella personalizará el tratamiento estético que se debe seguir de acuerdo a las necesidades de la piel.
ES muy importante que los tratamiento cosméticos aporten calma y confort. La esteticista  conoce la imoprtancia acerca de cuáles son los tratamientos y productos que ayudarán e hidratar, oxigenar, calmar y aportar más elasticidad a la piel.

Sequedad de manos y piel:
La sequedad, hinchazón, irritaciones, sensación de hormigueo  o retención de líquidos pueden ser algunos de los efectos del tratamiento oncológico. En la mayoría de los casos son transitorios y no revisten gravedad, pero podemos intentar prevenirlos para minimizar sus efectos.
Es muy importante evitar pequeños cortes ya que pueden ser difíciles de cicatrizar. Es por ello que te dirán que no es recomendable cortar las cutículas. Sin embargo, una buena hidratación de las cutículas te ayudará a minimizar posibles cambios en el aspecto de tus uñas.
Es importante hidratar manos, pies y  uñas como mínimo dos veces al día con cremas especiales para estas zonas del cuerpo y ricas en ingredientes que aporten gran suavidad a la piel.


TRATAMIENTOS FACIALES Y CORPORALES:
Los tratamientos faciales y corporales con la esteticista aportarán mayor viveza y gran confort a la piel.
Los masajes relajantes o hidratantes con cremas, aceites o envolturas ayudarán a mantener en óptimas condiciones el estado de la piel; Lola Garre cuenta con magníficos productos que contiene ingredientes como el Mentol o el Alcanfor para relajar los músculos. Y que proporcionarán una agradable sensación de calma y frescor. Delicadas esencias naturales como la lavanda, el Jazmín o la Rosa Damascena son utilizadas para potenciar el efecto relajante y hacer posible que la sensación de bienestar perdure en el tiempo. Cualquier masaje, facial y corporal le ayudarán a aliviar molestias musculares y a potenciar un mejor descanso. Siempre se recomienda comentar con el médico los masajes a nivel de piel.

     En el caso de que notemos gran sequedad en boca y labios nos ayudará a aliviar tal sensación aumentar el consumo de líquidos y utilizar cremas hidratantes ricas en aceite de ´Rosa Mosqueta, mantecas de Mango y Karité y aceite de Zanahoria.

Picores en el cuero cabelludo:
Tras una buena higiene con un jabón de ph neutro, se puede aplicar en el cuero cabelludo la misma crema hidratante que se utiliza para el cuerpo o la leche limpiadora facial. Los gorros de algodón que se pueden comprar en cualquier mercería le ayudarán a protegerse del frío y evitará roces.

Todos estos consejos son orientativos. En ningún caso deben sustituir las recomedaciones del médico. Ante la aparición de algún síntoma que sea molesto o persistente, es importante que nuestro cliente se lo comunique para que le indique el tratamiento más adecuado en su caso.


" Una actitud positiva no cambia el diagnostico pero si ayuda a disminuir el estrés y los pensamientos negativos"